08/04/2019
Las tardes ya son largas para las divertidas meriendas
El reencuentro vacacional con la familia en las tardes primaverales se disfruta más en una merienda que se alarga si, además, los embutidos ibéricos han sido protagonistas.
No son pocos los debates que, llegadas estas fechas, como cuando llegan las simétricas de octubre, se plantean en torno a si es beneficioso, contraproducente o banal el cambio de hora. Posturas, desde luego, hay de todo tipo. Están quienes entienden la bondad del ajuste, quienes preferirían que no se modificase y quienes no se ven afectados por lo que diga el reloj. Lo que no deja lugar a debate alguno, al fin y al cabo es un hecho, es que el horario de verano extiende las tardes. Y más se extienden si tenemos en cuenta que el propio ciclo anual así lo propicia. De forma que aquellas oscuras tardes de hace un mes, hemos pasado a tener luz hasta la hora del telediario. Si añadimos que la temperatura se suaviza, nos encontramos ante el marco ideal para disfrutar de las meriendas. Como además entramos en periodo vacacional, tiempo de encuentros, de volver a juntar a la familia, podemos decir que el plan nace por sí solo.
Falta pensar en el qué, en el contenido para que estas meriendas familiares en tiempos de Semana Santa sean agradables por la compañía pero también por el alimento. Sobre esto, sin embargo, hay poco debate, nada (casi) existe que suscite más consenso que los embutidos ibéricos.
En Cárnicas Mulas lo sabemos bien, no en vano somos el conocimiento acumulado de varias generaciones que han escuchado a los clientes y trabajado para ofrecer el mejor producto cuidando para ello el proceso desde el momento del nacimiento de las piaras hasta la venta en nuestras tiendas, tanto en las tres físicas como en la online.
El chorizo, el jamón, el lomo y el jamón -cuesta escribir los cuatro nombres sin levantarse de la silla para ir al frigo- de cerdo ibérico de nuestra tierra permiten reencontrarnos con nuestra historia, con nuestros sabores y olores.
Las tardes más largas, las temperaturas más suaves, nuestra familia en vacaciones y los ibéricos en la mesa. Cuesta encontrar un mejor marco para disfrutar de lo que somos y recobrar fuerzas para seguir en pos de lo que queremos ser. Para que el momento sea perfecto solo falta un vino, un refresco o una cerveza. Cárnicas Mulas se une al brindis.