Carnicas Mulas
Nuestro Blog
30/11/2017
El lechazo, una compañía de altura en la mesa
La carne de lechazo que ofrece Cárnicas Mulas es la más propia para las celebraciones que se avecinan.
El ser humano es ante todo un ser social. Tiene el maravilloso potencial de poder pensar por sí mismo y, por tanto, de tomar sus propias decisiones pero es incapaz de proveerse de todo lo que necesita al margen del resto de la sociedad. Debido a ello, el hombre se ve impelido a establecer ámbitos de convivencia y, a posteriori, generar vínculos con el resto de las personas que le rodean. De ese ser social surge inmediatamente la necesidad de festejar, de celebrar colectivamente los acontecimientos que marcan el ritmo de la sociedad. En estas reuniones sociales, el papel de la comida siempre jugó un papel fundamental. Al fin y al cabo, a lo largo de la historia el ofrecimiento de alimentos en abundancia a los invitados a estos rituales de confraternización fue todo un símbolo social, un modo de agasajo.
Desde bien antiguo también, nueve milenios según señalan las pruebas arqueozoológicas, el ganado ovino convive con el ser humano. El hombre, gracias a estos animales, se ha proveído de leche, lana y carne. De este larguísimo peregrinar conjunto, ha surgido un aprovechamiento y un aprendizaje paralelo. A la par que el ganado ovino se adaptaba a los distintos territorios, se han ido seleccionando los mejores especímenes y así han surgido distintas razas.
Entre la necesidad de establecer liturgias de festejo y la presencia continuada del ganado ovino, la carne de este se fue convirtiendo en habitual cuando de celebrar se trataba. Una costumbre que se ha mantenido hasta hoy.
En la actualidad la carne más apreciada es la de lechazo. Solemos aún decir ‘cordero’ pero cordero es una generalidad que engloba a todo los hijos de oveja que no han llegado a adultos. El lechazo, entre ellos, es el que no se ha alimentado de otra cosa que no sea la leche materna. Debido a ello, no llega al mes de vida y su peso se mueve entre los 9 y los 15 kilogramos al vivo.
En Cárnicas Mulas en Salamanca hemos mamado esa tradición, ese conocimiento secular y podemos ofrecer en nuestros 3 establecimientos lechazos criados en nuestra finca de Fuenterroble. También, claro, puedes adquirirlos en nuestra tienda on-line y nosotros se los llevamos a su domicilio en menos de 24 horas. Los lechazos que presentamos en nuestras tiendas son de raza merina negra, una raza muy poco abundante que produce una carne de enorme calidad con un sabor más intenso que las carnes de otras ascendencias. Esta carne tiene un color rosado y emana los aromas derivados de su crianza natural en las dehesas charras.
Tras pasar por Cárnicas Mulas solo quedará decidir la manera de prepararlo aunque la tradición indica el asado. Así, tierno y suave por dentro y con un exterior crujiente, cualquier celebración cumplirá ampliamente las expectativas, se fortalecerán los vínculos entre los participantes y los encuentros con la familia y los amigos tendrán una compañía de altura. Brindemos.
Desde bien antiguo también, nueve milenios según señalan las pruebas arqueozoológicas, el ganado ovino convive con el ser humano. El hombre, gracias a estos animales, se ha proveído de leche, lana y carne. De este larguísimo peregrinar conjunto, ha surgido un aprovechamiento y un aprendizaje paralelo. A la par que el ganado ovino se adaptaba a los distintos territorios, se han ido seleccionando los mejores especímenes y así han surgido distintas razas.
Entre la necesidad de establecer liturgias de festejo y la presencia continuada del ganado ovino, la carne de este se fue convirtiendo en habitual cuando de celebrar se trataba. Una costumbre que se ha mantenido hasta hoy.
En la actualidad la carne más apreciada es la de lechazo. Solemos aún decir ‘cordero’ pero cordero es una generalidad que engloba a todo los hijos de oveja que no han llegado a adultos. El lechazo, entre ellos, es el que no se ha alimentado de otra cosa que no sea la leche materna. Debido a ello, no llega al mes de vida y su peso se mueve entre los 9 y los 15 kilogramos al vivo.
En Cárnicas Mulas en Salamanca hemos mamado esa tradición, ese conocimiento secular y podemos ofrecer en nuestros 3 establecimientos lechazos criados en nuestra finca de Fuenterroble. También, claro, puedes adquirirlos en nuestra tienda on-line y nosotros se los llevamos a su domicilio en menos de 24 horas. Los lechazos que presentamos en nuestras tiendas son de raza merina negra, una raza muy poco abundante que produce una carne de enorme calidad con un sabor más intenso que las carnes de otras ascendencias. Esta carne tiene un color rosado y emana los aromas derivados de su crianza natural en las dehesas charras.
Tras pasar por Cárnicas Mulas solo quedará decidir la manera de prepararlo aunque la tradición indica el asado. Así, tierno y suave por dentro y con un exterior crujiente, cualquier celebración cumplirá ampliamente las expectativas, se fortalecerán los vínculos entre los participantes y los encuentros con la familia y los amigos tendrán una compañía de altura. Brindemos.
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