![]() Nuestro Blog19/03/2020
El estómago calentito y lleno para sobrellevar estos díasCalentar el estómago es una buena idea para templar el cuerpo y sobrellevar los rigores de estos duros días en casa
En estos días en casa, para que el cuerpo se recupere y se encuentre bien asentado a lo largo del resto del día, no hay mejor plan que una comida calentita, unos platos basados en las recetas de toda la vida y preparadas con productos de gran calidad. Pues resulta que ahora a esta alimentación sabrosa, sencilla y reconfortante ahora se la denomina ‘confort food’. Se llame como se llame, en Cárnicas Mulas hemos contribuido, y en ello seguimos, a que nuestros clientes elaboren sus platos con los mejores productos cárnicos.
Hoy, además, queremos darte alguna idea para que nuestra carne llegue a su mesa en sabrosos guisos. Estofado de pollos con pimientos y cebolla. Ingredientes:
Salpimentamos los muslos de pollo y les dejamos que vayan absorbiendo el sabor. Por otro lado cortamos los pimientos en juliana; las patatas, en trozos de buen tamaño; las cebollas en tiras largas. Enharinamos los muslos y les pasamos a la sartén para sellar la carne. Una vez veamos que está toda sellada, retiramos los muslos. Depositamos en la misma sartén la cebolla y las patatas. Añadimos un poco de agua y dejamos unos minutos hasta que la cebolla y la patata estén a falta de un punto para estar hechas. Devolvemos el pollo a la sartén y añadimos ajo en polvo junto a un ajo picadito. Vamos añadiendo agua para que no se seque el guiso. Añadimos sal y pimienta. Cuando el pollo esté casi listo, añadimos los pimientos. Ya solo falta esperar a que estos se hagan y retiramos del fuego. Sopa de carne de ternera de la Valmuza. Ingredientes:
Ponemos al fuego en una cazuela la carne de ternera, zanahorias, puerro, perejil y cebolla, un codillo de jamón, una punta de jamón y un hueso de rodilla de ternera todo cubierto de agua. Cuando hierva, añadimos los garbanzos –que obviamente han estado en remojo desde la noche anterior-. Bajamos el fuego y tapamos. Al cabo de hora y media, dos horas, cuando la carne y los garbanzos ya estén tiernos, apagamos el fuego. Colamos el líquido, lo dejamos hervir más tiempo y añadimos los fideos. La carne previamente troceada se puede comer tras la sopa o nos puede servir para preparar unas ricas croquetas. Los garbanzos con verduras darán consistencia a la comida. Llamémoslo confort food o comida de toda la vida, que eso es lo de menos, lo cierto es que de la forma más sencilla, si ponemos buenos ingredientes y un poco de cariño. ¡Juntos lo conseguiremos! Opiniones
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